¿Te ha pasado que te levantas por la mañana y te encuentras las ventanas llenas de gotitas de agua? La condensación en las ventanas es un problema más común de lo que parece, sobre todo en épocas de frío, cuando la diferencia de temperatura del interior de la casa con el exterior es grande.
Esta humedad solo va a conseguir que aparezca moho en los rincones de la casa, incluso en tus muebles. Por lo que hay que tener cuidado con este tema y seguir los consejos que te damos a continuación para evitar la condensación en tus ventanas.
Consejos para evitar la condensación en ventanas
Antes de entrar en cómo evitar la condensación en ventanas, tenemos que saber por qué ocurre este fenómeno. Cuando el aire caliente del interior de tu casa entra en contacto con las superficies frías de tus ventanas, el aire caliente se enfría y la humedad que libera forma esas molestas gotas de agua.
1. Mejora la ventilación
Esta es posible la manera más importante para mantener la humedad a raya. Abrir las ventanas varios minutos al día va a permitir que el aire fresco circule y reduzca la humedad del interior. Puedes hacerlo a la hora que mejor te venga, no es necesario hacerlo a primera hora de la mañana. Lo importante es hacerlo.
2. Usa deshumidificadores
Los deshumidificadores son una excelente herramienta para controlar la humedad del aire. Puedes colocarlo en las zonas que sean más propensas a la condensación. Su función es extraer ese exceso de humedad que hay en el aire, ayudando a que tus ventanas estén libres de condensación.
3. Reforma tus ventanas
Es una solución cara, pero en algunos casos es lo más recomendable. A veces el mal estado de las ventanas provoca que la humedad y la suciedad entre con más facilidad. Por lo que un acristalamiento adecuado ayuda a mantener la temperatura interior más constante y reduce la formación de condensación.
4. Mantén una temperatura constante y adecuada
Tener la temperatura del interior de la casa bastante alta, provocará un mayor contraste con la temperatura del exterior, por lo que aumentará en gran medida el efecto de condensación. Con termostatos programables puedes ir controlando el calor y mantenerlo en niveles adecuados.
5. Evita secar la ropa en el interior
Secar la ropa dentro de la casa aumentan significativamente la humedad en el aire. Si es posible, seca la ropa al aire libre o utiliza una secadora con ventilación adecuada.
Conclusión
Evitar la condensación en las ventanas no es una misión imposible. Realizando algunos cambios en la ventilación, el uso de deshumidificadores y un mejor control de la temperatura, puedes mantener tus ventanas libres de esas molestas gotitas de agua. Recuerda que mantener un ambiente seco y bien ventilado no solo ayuda a evitar la condensación, sino que también mejora la calidad del aire en tu hogar. Evitando la aparición de moho y bacterias indeseadas.
Si tienes alguna pregunta o necesitas asesoramiento personalizado, no dudes en confiar en Pelayo. Te ayudaremos a tomar la mejor decisión para tu hogar.